Hidromiel Bellator sorprende gratamente en la cata maridada del pasado viernes en Natura Restaurante
Éste viernes como novedad en las jornadas de #catasnatura a las que nos tiene acostumbrados Natura Restaurante y Bistró semana tras semana, el productor protagonista ha sido Hidromiel Bellator, una bebida con cierto grado alcohólico, no tan conocida como el vino y la cerveza, y que se produce por la fermentación de la miel de producción propia en la provincia de Cuenca.
Recordamos que esta iniciativa de catas maridadas que realizar Natura Restaurante todos los viernes con motivo de la Capitalidad Gastronómica. La programación de la primera mitad de año se encuentra publicada en la web del restaurante, ya que para asistir se requiere reserva previa.
Hidromiel Bellator es una empresa conquense que realiza absolutamente todo el proceso de forma manual, desde la producción de la miel en sus propias colmenas, el diseño del logotipo, el embotellado y etiquetado y la promoción y venta del producto final.
La cata comenzó con la presentación por parte de Mario Ortega y Beatriz López, empresarios, y además pareja, al frente de la empresa Hidromiel Bellator, que fueron relatando las características organolépticas de cada una de las cuatro variedades de hidromiel, y Evelin Padilla, jefa de sala del restaurante que por su parte explicaba el maridaje de cada uno de los platos preparados de forma muy acertada para la ocasión.
La sorpresa fue comenzar con Bellator Leve, una variedad de hidromiel burbujeante que sorprendió a los asistentes al ser un espumoso seco y que acompañó a la perfección el taco frito de steak tartar y ensalada trufada.
Posteriormente llegó el turno de un hidromiel muy especial, el Crocum Semidulce al Azafrán, en el que aúna doble producto conquense, la miel de la Serranía de Cuenca y el Azafrán de la Mancha, en este caso el plato que acompañó fue un bacalao confitado con tomate concasse, todo un acierto por parte del restaurante.
El tercer maridaje dio paso a la ópera prima, Bellator seco, una variedad seca, en la que las levaduras han consumido todo el azúcar presente en la miel, este hidromiel recuerda a algunos vinos jóvenes, pero siempre con un carácter propio en el que la miel tiene un papel dominante, en este casó se eligió un plato donde destacaba la salinidad como fue el niguiri de atún rojo glaseado con tare miso.
El último plato salado del menú fueron unas potentes albóndigas de pato y cous cous que daba broche con el Saturnalia Dulce Especiado, un hidromiel que destacaba por esar elaborado con 8 especias distintas, potencia y dulzor en estado puro.
No podía finalizar la cata maridada sin el toque dulce, un leve sorbete espumoso de fresa e hidromiel con un ningyo yaki de chocolate negro que despertó pasiones entre los asistentes.
¡Recomendamos reservar antes de que se agoten las plazas!
Programación y reservas: www.naturarestaurante.com