Bodegas Coronado deslumbra con su espumoso estrella ‘Javier Coronado’ en una cata inolvidable en Natura Restaurante: ¡Sorbo a sorbo, una experiencia que cautiva!
La velada comenzó con un estallido de sabores y aromas que prometían una experiencia gastronómica única. Con la cautivadora música de las burbujas del espumoso «Javier Coronado» de Bodegas Coronado resonando en las copas, los comensales se prepararon para un viaje culinario como ningún otro.
La primera parada fue una explosión de frescura con la ostra a la brasa, delicadamente acompañada por un gazpacho tropical. La combinación de la textura ahumada de la ostra con los sabores refrescantes del gazpacho tropical y las burbujas del «Javier Coronado» despertaron los sentidos y prepararon el paladar para lo que estaba por venir.
A continuación, las cocochas de merluza al pil pil verde transportaron a los invitados a un oasis de sabores marinos. La suavidad de las cocochas, bañadas en el pil pil verde, se complementaba perfectamente con los matices sutiles del vino «Aromas», creando una armonía en el paladar que dejó a todos con ganas de más.
El plato principal, un majestuoso royal de cordero lechal y foie, marcó el punto culminante de la velada. Con el vino «Diverso» acariciando cada bocado, los sabores intensos y la suavidad del cordero se fusionaron en un baile de sensaciones que deleitaron a los presentes y los transportaron a un estado de éxtasis gastronómico.
Para poner el broche de oro a esta experiencia épica, llegó el lomo alto de vaca con cebolleta aliñada, acompañado por el vino «Caprichoso». La combinación de la carne perfectamente cocida y las notas afrutadas y especiadas del vino crearon una sinfonía de sabores que dejó a todos en un estado de completa satisfacción.
Y como colofón final, una tarta de queso, chocolate y fresa que deleitó los paladares más exigentes, maridada con el exquisito «Rafael Casildo», cerró la noche en un crescendo de dulzura y placer.
En resumen, la cata maridada en Natura Restaurante fue mucho más que una simple degustación de vinos y platos exquisitos; fue un viaje sensorial que despertó emociones y dejó recuerdos imborrables. Bodegas Coronado demostró una vez más por qué su espumoso estrella, «Javier Coronado», es la elección perfecta para momentos especiales. ¡Una experiencia que cautiva sorbo a sorbo!
